Online      The Bene in English    Contacto

lunedì, dicembre 26, 2005

De Papa a Papá



Querido Papá Noel: Este ha sido un año bastante especial para este siervo tuyo. Si, a diferencia del año pasado, este año me nombraron Papa, pero no porque me cumpliste el pedido que venía haciéndote hace como diez años con incontables cartas en diferentes idiomas, no, ésa no me la vas a venir a facturar ahora a mi no, carajo mierda.



Querido Papá Noel: Este ha sido un año bastante especial para este siervo tuyo. Si, a diferencia del año pasado, este año me nombraron Papa, pero no porque me cumpliste el pedido que venía haciéndote hace como diez años con incontables cartas en diferentes idiomas, no, ésa no me la vas a venir a facturar ahora a mi no, carajo mierda.

A diferencia de otros años, éste, todo el mundo me andaba atrás, se preocupaba por mi, me consultaban por el catering (tan malo en años pasados por la obsesión de Karol por el ahorro), me pedían autorización para enviar tarjetas, en síntesis, yo fuí el centro de atención todo el tiempo.



Tantos años añoré eso Papá Noel, tantos años me la pasé mirándome al espejo, irritado después de la doce, maldiciendo por los regalos y esperando que Karol se atragantara con la sopa, que no me daba cuenta de que vivía en un vacío inmóvil, un laberinto sin salida, un encierro de corazón, que permanecía de piedra en la ocuridad de una celda de metal frío.

Hoy Papá Noel, vestido con todas las galas, con el camauro usado por última vez en 1963 por Juan XXIII, con un catering generoso, con un sinergia con las diósecis del mundo, con una fiesta post-via cruscis prefecta, munida del mejor champagne francés, cerré los ojos por un segundo y pensé en el mundo.

El mundo que nos alberga, ese mismo de los 227.000 muertos y 10.000 desaparecidas por el Tsunami, ese dónde semanalmente mueren miles de personas en Irak, víctimas del egoísmo y del autoritarismo, ese mundo dónde todo un continente está relegado y condenado a ser ignorado de por vida. Ese del adopte un africanito para navidad y brinde más feliz, un Ndugu un Shiara un Mbede, elijan el que más les guste.



Hace unas semanas Desmond Connell me hinchó para que viera "la guerra de los mundos" la película del que hizo el ET ese que le brillaba el dedo y otras boludeces más. Esta vez medio a regañadientes la ví, y fuí testigo de una metáfora de nuestros tiempos. Los seres humanos corriendo todos hacia el mismo lugar, la muerte irremediable.

Pero algunas personas, no importa su extracción, no importa su nivel cultural, intentan ir por otro camino, contracorriente. Esas personas ven la muerte inevitable, la presienten y buscan un lugar de seguridad, tomando sus propias decisiones y soltando mucha gente en el camino, personas de las que alguna vez fueron responsables, gente a la que aman o amaron. Hoy deben asistir a que esas personas tomen su propia decisión y ser testigos de que esa decisión sea seguir a la especie humana a la muerte segura. Trascender eso, soltar y cambiar el camino de todas maneras.



Ja, y después me vienen a mi a romper las pelotas, a criticar mi hermetismo, a decir que atento contra la vida, a decirme que soy un retrógrada, ja, pobres infelices, ellos siguen su camino y yo el mío, no importa que no sea el de todo el mundo, no importa que sea con una cruz o con un plumero, lo importante es despertarse Papá Noel, despertarse a la vida y entender y aceptar nuestras carencias.

Al Papá Noel que cree que se es lo que se tiene, al Papá Noel que cree que las cosas lo definen, al Papá Noel de los recursos humanos, al del Shopping center yla impersonalidad, a ése le digo, me cago en vos Papá Noel ya no te necesito para justificar mi mediocridad, ya no necesito plasmar en cartas mis frustraciones esperando que mágicamente aparezcan las cosas, ya no más escusas para disimular mi vacío espiritual Papá Noel, hoy, el Bene, te entierra a vos, a tus arquetipos y a tus festejos en el más hondo de los pozos que pueda encontrar.

A todos los que creen en la comunidad, a todos los que viven de la mano de la compasión, a todos los que no siguen el mismo camino de la masa anestesiada, a todos los que esperan el nuevo renacimiento espiritual, crean en lo que crean, amen a quien amen, suelten a quien suelten, hijos, padres, nietos, abuelos, tíos, sobrinos, bisnietos. A todos los que les late el corazón de furia, es tiempo de calma, de abrazarce en un abrazo sin banderas ni fornteras, sin racismo ni clases, sin diferencias religiosas. Cerremos los ojos y juntos, tengamos una feliz navidad y un próspero año nuevo.



¡Que manera de chupar! Me voy a buscar el bicarbonato.
Felicidades les desea El Bene, aunque si les preguntan, esto no lo escribí yo, ehh, no me armen quilombos políticos carajo mierda!

Es Palabra de Benedicto XVI



Powered by Blogger Subscribe with Bloglines Listed on BlogShares